Cristina Reyes ha lanzado una dura crítica al gobierno ecuatoriano, acusándolo de vender “gato por liebre” al pueblo, que termina pagando el costo de su ineficiencia. En su reciente declaración, Reyes subraya que cada hora de apagón representa una pérdida de 12 millones de dólares para Ecuador, advirtiendo que "nada es gratis". Según Reyes, el gobierno no contribuye con un centavo para mitigar estos costos, sino que es el bolsillo de los ciudadanos el que financia sus campañas y maneja las consecuencias de su gestión. La situación se agrava mientras el país enfrenta apagones recurrentes, con un gobierno que, según Reyes, solo está enfocado en su reelección y no en resolver los problemas que aquejan a la población.

En este contexto, la crítica de Cristina Reyes pone de relieve la falta de acción efectiva del gobierno para abordar la crisis de energía. Mientras los apagones siguen afectando a los ecuatorianos, Reyes cuestiona qué soluciones están realmente implementando los actuales líderes, aludiendo a un gobierno más preocupado por mantenerse en el poder que por resolver las serias deficiencias en los servicios públicos. La situación exige una respuesta urgente y efectiva, y la indignación de Reyes refleja la frustración creciente entre los ciudadanos que enfrentan diariamente las consecuencias de la inacción gubernamental.