El exministro José Serrano reveló una alarmante información sobre la posible complicidad de la fuerza pública con el crimen organizado. Según Serrano, alrededor de 1.500 policías estarían involucrados en actividades delictivas, poniendo en jaque la integridad y confianza en la institución. En un intento por abordar esta grave situación, Serrano envió un listado con los nombres de los 15 primeros sospechosos a la ministra del Interior, Mónica Palencia. Esta acción busca incentivar una pronta respuesta y medidas correctivas por parte de las autoridades competentes.

La revelación de Serrano destaca un problema de corrupción estructural que amenaza la seguridad pública y la efectividad en la lucha contra el crimen organizado. La situación se agrava con la noticia de que el primer policía en la lista ya ha huido, lo cual podría dificultar las investigaciones y las acciones judiciales correspondientes. La ministra Palencia enfrenta ahora el desafío de restaurar la confianza en la policía, implementar reformas necesarias y asegurar que los implicados sean llevados ante la justicia para garantizar un sistema de seguridad más transparente y efectivo.