En una polémica sesión de la Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional, asambleístas del Gobierno dejaron sin quórum la audiencia, evitando así escuchar el testimonio clave del exministro José Serrano. Durante el tenso encuentro, la ministra del Interior, Mónica Palencia, quien enfrenta un juicio político, protagonizó un momento de confrontación al golpear la mesa de la sala antes de abandonar la sesión junto a varios legisladores de la bancada oficialista. Este retiro ha sido interpretado como una maniobra para retrasar el proceso y evitar que se esclarezcan las acusaciones en su contra. Asambleístas de oposición denunciaron que el Gobierno está utilizando estrategias para ocultar la verdad sobre temas relacionados con el narcotráfico y la inseguridad que afecta al país.

La ministra Palencia alegó que el proceso en su contra viola sus derechos, afirmando que se le ha negado la defensa adecuada. Sin embargo, la presidenta de la Comisión, Pamela Aguirre, mantuvo el orden durante los acalorados intercambios verbales y decidió no dar oportunidad de réplica a la ministra, lo que generó aún más controversia. Según los críticos, este juicio no se trata solo de Mónica Palencia, sino de una lucha por intereses más amplios en un país azotado por la criminalidad y el narcotráfico. Las tensiones dentro de la sesión dejaron al descubierto el descontento de algunos asambleístas, quienes acusan al Gobierno de usar su poder para bloquear las investigaciones.

En conclusión, lo sucedido en la Comisión de Fiscalización pone de manifiesto la profunda división política en el país y las acusaciones de uso indebido del poder por parte del Gobierno. Mientras se busca justicia y transparencia en temas de seguridad nacional, las estrategias de evasión solo aumentan la desconfianza entre la ciudadanía y los actores políticos, en medio de una crisis de seguridad que sigue cobrándose vidas diariamente.
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